28/12/07

Julien Gracq, 1910-2007

El diálogo (¿premonitorio?)pertenece al capítulo Nochebuena de El mar de las Sirtes. Habla Carlo:

¡Si supieras lo atado que estoy! He tendido mis hilos por todas partes y ahora me encuentro envuelto como un gusano en su capullo, eso es, amarrado, atado, hecho un envoltorio. Ni siquiera puedo mover los brazos y las piernas. ¿Me crees enfermo? (...) Pero he hecho demasiadas cosas para lo que me queda de vida, eso es. Cuando uno entiende eso, se le acabó todo; es como un muelle que se parte. ¿Te das cuenta de lo que es envejecer? He llevado una carga muy pesada en los hombros, y ya no tengo fuerzas para levantarla. (...) No poder levantar lo que ha hecho uno es la losa de la tumba.



Con anterioridad dice: “El desierto le puede a uno

¿A que desierto se refiere Gracq? Siempre me lo he preguntado.

(El mar de las Sirtes de Julien Gracq, traducción de José escué)

Pues eso, el desierto nos puede a todos.

Graqc por João Ventura

4 comentarios:

João Ventura dijo...

Quando, na próxima semana, eu for a Paris - cidade que Julien Gracq adoptou durante grande parte da sua vida, antes de regressar definitivamente à sua casa natal - seguirei o conselho de Pierre Assouline e irei até à livraria de José Corti, o editor-livreiro da rue de Médicis, para, talvez, comprar ali algum livro de Gracq e depois, se a meteorologia o permitir, já no outro lado da rua, no Jardin du Luxembourg, folheá-lo «armé d’un canif, couteau, coupe-coupe, machette, tronçonneuse ou tout objet susceptible de disjoindre en un bruit exquis les pages non massicotées», porque assim o exigem os livros de José Corti.
Um bom Ano Novo. João.

Portnoy dijo...

Buen viaje, João... y buena lectura de Gracq.
En 2008 deberías viajar a Barcelona y leer a Vila-Matas en el Passeig de Sant Joan.
Un saludo

Anónimo dijo...

Pues le entran a uno estos días muchas ganas de leer a Gracq. Gracias, Portnoy, como siempre, por tu blog. El de João también es una mina. Descubrí a Vila-Matas hace tres años, pero solo en este 2007 me he lanzado a comprar y leer algunos de sus libros anteriores a París... que fue el que me regalaron entonces. Desde aquí ha sido todo comprobar la telaraña nueva de descubrimientos, leidos ya algunos y, lo mejor, la mayoría, aún por leer: Gracq, Bolaño, Pitol, Tavares, Ribeyro, Wilcock, Duras, etc. etc. etc.
Yo siempre había tenido problemas con los libros "escondidos", ese infiltramiento en los escondrijos que lo da la gente que lee mucho más que uno. Por eso estoy agradecido a ti, a Vila-matas, a las listas ajenas de autores de libros, de películas, encontradas en blogs en los que da gusto perderse.

Un saludo cordial para ti y otro para João. Buenas lecturas. Hay mucho que leer y sin prisa, con gusto.

Buen paso de año, y que no os caiga el 7 encima al poner el 8!

Juan Asensio dijo...

Buenos dias.
Sobre Julien Gracq, vea el vinculo.
Saludos.