19/5/08

Sanxia haoren, (Still life o Naturaleza Muerta) de Zhang Ke Jia

Nos comentaba Daniel a propósito de Infierno en la ciudad de Beichuan que en las películas de Jia Zang Ke la hibridación entre documental y ficción sirven para potenciar la denuncia social que encierran pero que no tiene claro que el empleo de la realidad no sea también criticable: "¿No es suficientemente trágica la realidad como para que tener que resaltarla con ese impactante contraste formal? ¿O se nos muestra la belleza como lo único que les queda a unos personajes que lo han perdido todo?"
Así que me lanze a rescatar de la estantería donde casi la tenía olvidada Sanxia haoren (2006) o Still life o Naturaleza Muerta, de Zhang Ke Jia



La construcción de la presa de las tres gargantas, orgullo de la ingeniería política china provoca un masivo desplazamiento de personas que verán sus hogares y sus pueblos, sus vidas, anegadas por las aguas del embalse. Buscando a su mujer y a su hija llega Sanming y acabará trabajando en un equipo de demolición de edificios que finalmente permanecerán bajo el agua.
La película funciona en todos los sentidos como una especie de "En de-construcción" donde las ruinas sirven de escenario para una vida llena de contrastes. No es la idílica vida rural de algunas películas de Yimou Zang. Aquí los obreros del equipo de demolición llevan sus móviles, Yun-Fat Chow es el ídolo de los emergentes mafiosos que ven sus películas por televisión y la lucha de clases está definitivamente perdida por parte de los trabajadores.



La destrucción, en este caso, tiene una utilidad estética que nada tiene de inmoral. Still Life-Naturaleza muerta es una ficción y, de alguna manera recuerda a otras ficciones muy lejanas, cultural y estilisticamente a la propuesta de Zhang Ke Jia. Mirad la siguiente serie y decidme si no os recuerda a una película que nada tiene que ver con ésta:





(Hay que fijarse en el fondo de edificios)


Sanxia haoren-Still Life-Naturaleza muerta merece la pena verse, es innegable.
Para nosotros, los que frecuentamos este rincón de la red, tiene además un atractivo especial, una especie de guiño que entenderemos quienes hayamos leído a Vila-Matas y su recurrencia por asomarse al abismo. Al final de la película podemos contemplar la siguiente escena:



Cuando el agua cubra el pueblo (¿ya, hoy, ahora?) ese vacío que atraviesa el funambulista será imposible de cruzar.
¿Lee Zhang Ke a Vila-Matas?

7 comentarios:

Daniel Quinn dijo...

Y los contrastes que dices están en todo, desde los temas hasta el propio armazón de la película, partido en dos como un espejo fascinante que a veces refleja la propia imagen y a veces la contraria.

Por cierto, no me acordaba de la escena del funambulista, da vértigo por su significado íntimo, que tan bien desgranas, y por el discurrir vilamatiano que parece seguir inundando (nunca mejor dicho) todo. Seguro que si hubiera visto la peli después de leer Exploradores del abismo la recordaría.

Muchas gracias por el enlace, hace ilusión, y justo antes de ir a la cama sienta estupendamente :)

Un saludo Portnoy!

PD: Ah!!, no caigo en la película a la que de refieres con la imagen de los edificios..., espero que nos saques de dudas...

Portnoy dijo...

Pues me recordó el final de Fight Club, con el "narrador" y la chica mirando por la ventana como se desploman los edificios... una película pre-11 S, cuando un edificio que caía significaba otra cosa. La escena me desbordó, uno se concentra en la simbología de los Toffee Conejo Blanco (que debería tener, como Cigarrillos, Te, Licor, apartado propio)... de hecho hay mucho elemento simbólico en la película... debería ver El Mundo, a ver si es posible que Zhang Ke intente apelar a la globalización cultural... lo local y lo universal... platillos volantes y Vila-Matas y Palahniuk en la presa de las Tres Gargantas... no sé, ¿cómo saber lo que piensa un artista?
Un saludo Daniel, y no hay de qué dar las gracias... ya somos como una especie de corporación en la que todos nos interrelacionamos, ¿no?
:-)

Daniel Quinn dijo...

Pues sí, intenta ver El mundo. Es justo eso, la gran película sobre la globalización. Comenté algo de ella cuando Jia ganó el León de oro en Venecia, hace ya 20 meses. ¡Qué jóvenes éramos! Jeje.

Un saludo.

Portnoy dijo...

Sí, sí, si te sigo atentamente... bueno, con toda la atención de la que soy capaz... tenía ganas de ver Naturaleza muerta desde que comentaste que ganó en Venecia a pesar de que la mayoría de los críticos y cronistas "olvidaron" ir a ver la película.
En fin, sí... éramos tan jóvenes...
Un saludo
(The world está en la lista)

El Miope Muñoz dijo...

El abismo de Zhang-Khe es el de la incertidumbre del individuo perplejo ante la historia (que ya me dirá usted si Naturaleza Muerta no es Cloverfield por otros medios/media si tomamos esa lectura como clave).

Vila-Matas, de eso sabe usted más que yo, pero me temo que nos asoma a una historia todavía mayor que la de Zhang-Khe. Me quedo, europeísta que me pongo, con EVM.

Anónimo dijo...

a veces la destrucción es tan bonita. Cuando el agua cubra el pueblo: ¿hoy?, ¿ahora;? ¿todo?, ¿por partes?

Un solitario con pipa y copa de coñac dijo...

Es interesante, al hablar de la belleza de la destrucción, tener presente al fotógrafo Edward Burtynsky y su extenso trabajo, al igual que la película que se hizo sobre su trabajo.

Naturaleza muerta es una film magno, sublime y bello.