Tenía varios planes respecto al blog que voy a tener que aplazar. La Realidad golpea, continuamente. La Realidad es ese muro infranqueable que poco a poco nos constriñe y reduce nuestro espacio. La Realidad asfixia. En ocasiones mata. No es el caso.
Todo queda pospuesto.
Cedo mi indignación a Juan Francisco Ferré.
3 comentarios:
Ánimo, Javier, y que le den por culo a esos tipos aparentemente normales de los que habla Ferré.
Gracias Mike
El texto está muy bien escrito. La maldad tiene muchas caras y esta, tan mediocre y atenazadora, es especialmente deleznable porque estrangula a los sencillos con mano burocrática y vulgar, con garras desprovistas de padrastros y aftershave mañanero.
Publicar un comentario