11/12/06

Y después...

¿Tiene esto solución? A veces la tierra tiembla. El epicentro del terremoto está en el norte o está en el sur, pero yo escucho cómo la tierra tiembla. A veces me mareo. A veces el temblor dura más de lo normal y la gente se coloca debajo de las puertas o debajo de las escaleras o sale corriendo a la calle. ¿Tiene esto solución? Yo veo a la gente correr por las calles. Veo a la gente entrar en el metro y en los cines. Veo a la gente comprar el periódico. Y a veces tiembla y todo queda detenido por un instante. Y entonces me pregunto: ¿dónde está el joven envejecido?, ¿por qué se ha ido?, y poco a poco la verdad empieza a ascender como un cadáver. Un cadáver que sube desde el fondo del mar o desde el fondo de un barranco. Veo su sombra que sube. Su sombra vacilante. Su sombra que sube como si ascendiera por la colina de un planeta fosilizado. Y entonces, en la penumbra de mi enfermedad, veo su rostro feroz, su dulce rostro, y me pregunto: ¿soy yo el joven envejecido? ¿Esto es el verdadero, el gran terror, ser yo el joven envejecido que grita sin que nadie lo escuche? ¿Y que el pobre joven envejecido sea yo? Y entonces pasan a una velocidad de vértigo los rostros que admiré, los rostros que amé, odié, envidié, desprecié. Los rostros que protegí, los que ataqué, los rostros de los que me defendí, los que busqué vanamente.


Roberto Bolaño; Nocturno de Chile

13 comentarios:

Javier Moreno dijo...

¿No hay una escena en la que describe a Pinochet ahí medio adormilado?

Mazo dijo...

J.,(qué pena yo aquí de metido)Sí, ahí está la escena de Pinochet dormido, sosteniendo su lapicero, mientras aprende de materialismo histórico.

Sobre este párrafo, recuerdo la carrera 7a. el domingo en Bogotá llena de ladrillos blancos, con un nombre y una silla vacía frente a ellos, para cada uno de esos rostros asesinados y desparecidos, y veo aquí a la verdad como un zombie, la verdad de los muertos, como esa fila de ladrillos que atravesaba media ciudad. No sé si cuando se levanten esos muertos a contar su historia todo esto tendrá solución pero creo que así tendrá que iniciar un nuevo amanecer después de una 'tormenta de mierda' que era el primer nombre del Nocturno de Chile. Espero que los chilenos nos enseñen a superar esto en unos años.

Anónimo dijo...

Maldita sea; no se pueden dejar libros a los amigos cuando el tirano agoniza. Tenia preparado yo un texto similar al suyo, maese, pàra cuando la palmase el carcamal, pero me vi en la obligación de dejarle el libro...

En fin, señor Portnoy, pase las fiestas de la forma más acpetable.

Mis más corteses respetos.

Anónimo dijo...

A programa doble con el post de J.

Anónimo dijo...

A leer en programa doble con el comentario de J. LOs dictadores que mueren en la cama, son un disgustito.

Anónimo dijo...

A leer en programa doble con el comentario de J. LOs dictadores que mueren en la cama, son un disgustito.

Anónimo dijo...

A leer en programa doble con el comentario de J. LOs dictadores que mueren en la cama, son un disgustito.

Anónimo dijo...

A leer en programa doble con el comentario de J. LOs dictadores que mueren en la cama, son un disgustito.

Anónimo dijo...

A leer en programa doble con el comentario de J. LOs dictadores que mueren en la cama, son un disgustito.

Anónimo dijo...

A leer en programa doble con el comentario de J. LOs dictadores que mueren en la cama, son un disgustito.

Portnoy dijo...

De acuerdo... lo leeremos
:-)

Javier Moreno dijo...

Qué repetitivo resulta a veces Singer... ;)

Anónimo dijo...

PUTOS ORDENADORES DE LA UNIVERSIDAD.

Y solo lo diré una vez.